jueves, 28 de enero de 2010

Cosas que odio de ti



Siguiendo con mi política de odios...esta vez me referiré a las cosas que odio de ti y únicamente de ti.

Tu impuntualidad.
Tu petulancia.
Tu mal humor.
Tu timidez.
Tu poco carisma.
Tu amargura.
Tu conchudez.
Tu sorna.
Tus lágrimas.
Tus malicia.
Tu cursilería.
Tus compras.
Tu dinero.
Tus traumas.
Tus complejos.
Tus locuras.
Tus pensamientos.
Tus sesudos comentarios.
Tu poca autoestima.
Tu cobardía.
Tus miedos.
Tu silencio.
Tus tropiezos.
Tu poca constancia.
Tu inestabilidad.
Tus fraudes.
Tus estafas.
Tus fracasos.
Tu ceguera.
Tu sordera.
Tu mudez.
Tu sordidez.
Tus huidas.
Tus escondites.
Tus partidas.
Tu poco talento.
Tu vulgaridad.
Tu desventura.
Tu mal gusto.
Tu debilidad.
Tus negaciones.
Tus odios.
Tus envidias.
Tu maldad.
Tu adiós.
Tus retrocesos.
Tu desfachatez.
Tu terquedad.
Tu pituquería.
Tu ridiculez.
Tus prisas.
Tu solemnidad.
Tus pérdidas.
Tus ilusiones.
Tus mentiras.

martes, 26 de enero de 2010

5 cosas que odio de todo el planeta


1.- Odio el sonido de los claxon: No solo los odio: Los detesto con todo mi pequeño y atribulado ser. No hay manera en que no me altere el sonido chirriante, antojadizo, jodido, cargoso, molestoso, irritante e insoportable de ese invento que lo único que hace es contribuir a la contaminación acústica de este país. Debe haber sido 500 mil millones de veces las ocasiones en las que he insultado chóferes por ponen en práctica tan dañino hábito. Y lo peor es que no dejan de hacerlo pese a las multas que supuestamente han creado. ¿Cómo es que un pequeño taxi tenga la potencia de un camión que transporta arroz en plena Panamericana sur? No lo entiendo y jamás lo entenderé. Y para colmo, he tenido problemas con familiares y amigos por culpa de estos ruidos pues después de escucharlos, automáticamente me pongo de mal humor y, evidentemente, me vuelvo un ser agresivo e intratable lo cual, como ya dije, me ha traído (no tan) pequeñas desavenencias. Muerte al claxon, ¡¡por favor!!

2.- La basura: Aunque valga hacer una aclaración: La basura en su lugar es perfecta, el problema es cuando la basura está en las calles. Yo digo: ¿realmente es taaaan difícil poner la envoltura de tu galleta en una bolsa y llevarla hasta un tacho? ¿Tanto trabajo cuesta esperar a bajar del carro? ¿Por qué no pueden caminar unos pasos más? ¿No se dan cuenta, acaso, que afean la ciudad? Come on!

3.-El humo del cigarro: Ok, yo alguna vez en mi vida fumé, pero es realmente conocido que lo hice, como casi todo el mundo, por simple y pura posería, monada y por un afán inexplicable de aceptación. Pero ahora que no tengo pelos en la lengua y algo más de personalidad debo admitir que no me gusta tener cerca gente que fuma. El humo del cigarro a-pes-ta. Y punto.

4.-La impuntualidad: Probablemente mis amigos (a los que hecho esperar horas) no me crean pero realmente la odio. Aunque permitiéndome hacer un pequeño análisis diría que yo sí me hago esperar porque inconcientemente (aunque si lo acepto ahora digamos que tan inconciente no es) pienso que las personas importantes se hacen esperar y es hartamente conocido que mi ego alcanza magnitudes incontrolables, por lo que sí, me creo importante y sinceramente lo soy (que alguien me salve del amor propio ¡por Dios!). El hecho es que si a mí me hacen esperar, no solo me molesto (y mucho) sino que me altero y empiezo a maldecir hasta a la hormiga que pasa por alguna plata en esos momentos.

5.-La cursilería: Lamentablemente, el Facebook tiene la opción de ver las actualizaciones. Y digo lamentablemente porque en ellas se puede ver el “espontáneo” amor de algunas parejas a las que tengo agregadas. Y no tendría ningún problema con todas esas muestras de afecto si no fueran porque mis ojos se posan en ellas y a veces es muy tarde pues ya lo leí todo y me el asco y las arcadas se acercan como un torrente, casi casi como cuando a Mafalda le dan sopa. No voy a negar que a veces yo también me he puesto medio cursilón pero eso en el ámbito privado, obvio. No ando dando muestras de afecto así por así, come on! Menos por Facebook. Y encima esas palabras son tan rosa y además melosas que nos resbalamos en tanta miel.

I hate everyone- Get set go.

Y me vino la angustia...



No voy a negar que he estado intentado por todos los medios desprenderme de partes de mí que me hacían peor persona. ¿Lo estoy logrando? Pues, no lo sé. O sea, puedo decir con aires de solemnidad que sí, pero come on! La verdad la veremos en unos meses, ¿no? Recién vamos 26 días de enero y sería muy prematuro dar algún tipo de declaración acerca de mi extraña y truculenta vida. Por lo pronto, iré tratando de entenderme más. Hasta el 31 de diciembre creía en la filosofía de que “el otro año seré otro David”, pero llegó el año nuevo y me sentí estúpido repitiéndome eso. Sin embargo, recordé algunas cosas que había dejado de lado: Disciplina, equilibrio y que TODO pero absolutamente TODO depende de mí.

Es cierto que a veces soy poco constante, que me agoto, y que luego me entra la angustia, como una suerte de Felipito, pero la verdad es que ya estoy grandecito para andarme con tonterías. Ya estuvo bueno de cuestionamientos, de confusiones, de tormentos. Ok, es cierto que sin todos ellos no sería yo pero bueno, los voy a relegar un poquito en aras de dedicarme a cosas mas importantes, ahora. Siento que el tiempo y la vida se me va y necesito hacer muchas cosas. ¡Ya cumplo veinte! Y por alguna extraña razón siento que esos años ya pesan. Supongo que esta década terminaré la carrera, trabajaré, ganaré experiencias, trataré de independizarme de alguna manera, viajaré, escucharé mucha música pero, sobre todo, amaré. No me gustaría ni casarme, ni tener hijillos, pero quién sabe…la vida nos tiene guardadas algunas sorpresillas por ahí.

Pero si hay algo que espero mucho es que no me abandonen esas personas a las que tanto quiero. Sin ellos no tendría la fortaleza de seguir adelante, pese a las dificultades. El 2009 fue un año malo en bastantes aspectos, así que ando bien concientizado que el 2010 traerá felicidad, mucha felicidad, y no temo estar sonando romántico, pues es un deseo que sale del alma, de lo más profundo del alma porque este año no quiero que me venga la angustia…

Y finalmente, tomando las palabras de Feliper pero en mi versión: "Desde hoy seré un Davilino decidido, la duda ahora es que no sé si optar por la AUDACIA ARROLLADORA o por la DETERMINACIÓN TAJANTE"

Algunas canciones que me gusta mucho: The Beatles- I’ve just seen a face.



Janis Joplin- Me and Bobby Mc Gee.